domingo, 10 de mayo de 2015

10 años menos

El lifting o estiramiento facial es una intervención quirúrgica para reparar la piel de la cara y cuello marchita, arrugada y hundida que se produce por el paso del tiempo, por una dieta alimenticia pobre o también por tendencia hereditaria. Se realiza quitando el exceso de grasa, tensando los músculos principales, y rellenando la piel de la cara y cuello.
"Estiramiento facial", "Ritidectomía", "Facelift" o "Lifting" son términos generales que se pueden aplicar a diversos procedimientos o cirugías faciales destinados a elevar y tensar la piel facial con objeto de reducir los pliegues o arrugas y conseguir un aspecto más joven. 
El Lifting habitualmente trata la piel del cuello, de la barbilla, las mejillas y las regiones perioculares y temporales. Algunas veces se incluye la frente y las cejas o se pueden llevar a cabo por separado. Puede combinarse esta cirugía con otros procedimientos asociados, como la Blefaroplastía o Cirugía de Párpados, que tiene como objetivo rejuvenecer la mirada.

¿Qué se hace?
Las arrugas en la piel aparecen a medida que van pasando los años, sobre todo en la zona de alrededor de la boca y nariz, de los ojos "patas de gallo", en el área interciliar (área entre las dos cejas), etc. Los depósitos de grasa aparecen alrededor del cuello.
La mandíbula se torna floja y caída (papada). Otros factores que pueden contribuir a problemas en la piel en personas más jóvenes son una dieta pobre, el tabaco, la obesidad y también los factores hereditarios. El lifting ayuda a mejorar los daños visibles de la piel y músculos, así como a recuperar un aspecto más joven. El lifting también puede realizarse aprovechando una operación para reconstruir la nariz o estirar de los párpados.
El lifting se puede hacer con dos tipos de anestesia. Una es la anestesia local (el paciente está adormilado y sin dolor). La otra es la anestesia general en la que el paciente está profundamente dormido, sin sentir dolor.
El cirujano plástico realiza unas incisiones sobre la línea del pelo, en las sienes, detrás del lóbulo de las orejas y en la zona baja del cuero cabelludo. Después extrae el tejido graso, estira la piel y, por último, cose (sutura) las incisiones.

Normalmente se realiza para reducir los signos del paso del tiempo (arrugas) con las que el paciente se siente insatisfecho. Esto puede, incluso, crear problemas de salud.

¿Qué esperar de la cirugía?
La mayoría de los pacientes están contentos con los resultados.
A veces el cirujano tiene que colocar un pequeño tubo de drenaje debajo de la piel de detrás de la oreja para drenar una pequeña cantidad de sangre que puede acumularse en este lugar. Se colocan unos vendajes suficientemente compresivos alrededor de la cabeza, para evitar la hinchazón y los cardenales (hematomas). Normalmente el paciente no suele sentirse muy incomodo después del lifting.
En todo caso se puede administrar alguna medicación para el dolor. El paciente puede notar adormecimiento en la piel: esto es normal y desaparece en unas pocas semanas.
El paciente debe mantener la cabeza elevada con dos almohadas (por lo menos en un ángulo de 30 grados) para evitar la hinchazón.
El tubo de drenaje (si ha sido necesario colocarlo) se quita después de 1 ó 2 días de haber realizado la intervención.
Los vendajes se quitan después de 1 a 5 días.
La cara puede aparecer pálida, morada e hinchada, pero en un plazo de 4 a 6 semanas recuperará un aspecto normal.
La mayor parte de los puntos se quitan en 5 días, aunque a veces los puntos o grapas situados en el borde del cuero cabelludo se dejan algunos días más, porque pueden tardar algo más en cicatrizar.

Recuperación
Durante 10 a 14 días el paciente nota hinchazón, tirantez, adormecimiento, hematomas, etc. La mayoría de las cicatrices se esconden en la línea del pelo y desaparecen después de meses. Se desaconseja la exposición solar.

sábado, 9 de mayo de 2015

Adiós a esas llantitas tan odiadas

¿Qué es la liposescultura?

La lipoescultura es una forma avanzada de liposucción un poco diferente a la liposucción convencional. Esta técnica es utilizada para moldear el cuerpo, a diferencia de la liposucción convencional, la lipoescultura utiliza la grasa removida para mejorar la prominencia y definición de algunas áreas del cuerpo como los glúteos o las piernas. 

Debido a que usualmente el procedimiento es realizado bajo anestesia local el paciente no sufre tanta inflamación ni de las hemorragias asociadas a otras técnicas de liposucción. Usualmente una solución anestésica es inyectada en el área que se va a tratar, esto para contraer las arterias y los vasos sanguíneos y así reducir el posible sangrado y la hinchazón. La diferencia entre la lipoescultura y la liposucción es básicamente que la lipoescultura remueve cantidades menores de grasa que la liposucción y está enfocada específicamente en la escultura y moldeo de algunas áreas del cuerpo. La lipoescultura es comúnmente realizada en el área del abdomen, muslos, espalda y brazos. 

¿Seré un buen candidato para una lipoescultura?

Si cumples con una o varias de las siguientes condiciones esto pudiera indicar que tú eres un buen candidato para la cirugía de lipoescultura: 
Tienes áreas de depósitos de grasa que están fuera de proporción con el resto del cuerpo y no pueden ser eliminadas con dieta y ejercicio, también conocidas como “grasa resistente a la dieta”.
Tienes áreas con cantidades mínimas de exceso de piel y la elasticidad en la piel es sana (la lipoescultura remueve la grasa no la flacidez).
¿Cómo me evaluará el cirujano plástico para una lipoescultura?
Durante la primera consulta, el cirujano podría pedirte que te veas en el espejo y que señales exactamente el área que te gustaría mejorar. Normalmente se toman fotografías especialmente si el área que se va a tratar está en la parte posterior (espalda, glúteos, etc.). Esto le ayudará al cirujano plástico a entender tus expectativas y determinar si son realistas y pueden ser logradas. Probablemente el cirujano haga una prueba para determinar la elasticidad de tu piel. 

Seguramente el médico también discutirá cuál es tu peso ideal y cuales son algunos objetivos realistas. También preguntará si planeas embarazarte en el futuro. 

Debes venir a la consulta preparada/o para discutir tu historial médico incluyendo si has tenido cirugías previas, condiciones medicas previas y presentes, alergias y que medicamentos estás tomando. Es importante que proporciones la información completa. En el caso de pacientes con problemas de hipertensión, tiroides, diabetes, etc., estas condiciones deben ser revisadas por el médico debido a que pueden aumentar algunos riegos asociados con la cirugía. 

¿Cómo se realiza la cirugía de lipoescultura?

La técnica básica de la lipoescultura implica remover la grasa por medio de un pequeño tubo de metal llamado cánula, que se pasa a través del tejido grasoso. Una de las formas más comunes para llevar a cabo el proceso de liposucción es la aspiración de la grasa colocando una bomba que genera vacio. Esto se conoce como liposucción de succión asistida (SAL) por sus siglas en inglés. Además, puede ser utilizado un motor en la cánula lo que hace que esta oscile de un lado a otro realizando así la mayor parte del trabajo de la liposucción, a esto se le conoce como liposucción asistida por potencia (PAL) por sus siglas en inglés. 

En algunos casos se utiliza un generador ultrasónico que produce ondas de sonido que están por encima de la frecuencia audible. Las ondas rompen las células de grasa y esta es eliminada utilizando la técnica de SAL. Por otro lado, también se puede utilizar un rayo laser para romper las células de grasa. 

Es importante tener en mente que cada uno de estos métodos tiene sus ventajas y desventajas. Estos métodos pueden ser discutidos con el cirujano durante la consulta. Asimismo, las técnicas pueden ser combinadas para obtener resultados óptimos. Las decisiones concernientes a la técnica que debe ser utilizada son responsabilidad del cirujano plástico. 

Los riesgos de la liposucción

Afortunadamente, las complicaciones mayores asociadas con la cirugía de lipoescultura son poco frecuentes. La lipoescultura es uno de los procedimientos más comunes realizados por cirujanos plásticos. 



La gran mayoría de las veces la cirugía es realizada sin que el paciente experimente problemas. 

El tema de riegos y posibles complicaciones de la cirugía es algo que debes platicar en persona con el cirujano o con alguien del personal médico del cirujano. Los riesgos en la mayoría de las cirugías son similares. Algunas de las posibles complicaciones que el cirujano te explicará incluyen hematomas (una acumulación de sangre bajo la piel que pudiera requerir ser drenada), infecciones, cambios en las sensaciones, cicatrices, reacciones alérgicas, daño a las estructuras subcutáneas, así como resultados insatisfactorios que podrían necesitar procedimientos adicionales. Otros riesgos más específicos de la liposucción podrían incluir heridas e irregularidades. 

Es posible minimizar algunos riesgos asociados con la cirugía si se siguen las indicaciones y recomendaciones del cirujano plástico, tanto antes como después de la lipoescultura. 

Preparación pre-operatoria
El objetivo del cirujano plástico y de todo el personal es hacer que tu experiencia con la cirugía sea lo más fácil y cómoda para ti. 

Si eres una persona que fuma, es recomendable que dejes de hacerlo antes la cirugía, esto debido a que fumar puede perjudicar el proceso de sanación. Además algunos medicamentos pueden aumentar el riesgo de una hemorragia. Es necesario evitar ciertos medicamentos antes de someterse a una lipoescultura, estos incluyen Aspirina, medicamentos antiinflamatorios y algunas vitaminas y remedios homeopáticos. Es posible que el cirujano te de indicaciones pre-operativas adicionales. 

La lipoescultura es un cirugía que se realiza de manera ambulatoria (se da del alta al paciente el mismo día). Es por eso que debes pedirle a algún familiar o amigo que te lleve a casa y que te acompañe durante 24 horas después de la cirugía. 

El día de la cirugía de cirugía
El día de la cirugía se te administrarán medicamentos para que te sientas cómodo/a durante el procedimiento. Frecuentemente, durante la cirugía de lipoescultura se emplea anestesia local y sedación intravenosa, no obstante en algunos casos también se puede utilizar anestesia general. Para tu seguridad durante la operación, se utilizan varios monitores para revisar el corazón, la presión sanguínea, el pulso y la cantidad de oxigeno que está circulando por la sangre. 

Cuando la cirugía es finalizada, el paciente es llevado a un área donde se le continúa monitoreando de cerca. Es muy probable que después de la cirugía el paciente tenga que usar una faja de compresión que normalmente se utiliza para ayudar a que la piel se “encoja”. Acerca del dolor postoperatorio, algunos pacientes reportan que el área se siente adolorida, como si hubieran hecho ejercicio extenuante. 

Probablemente el médico te permitirá regresar a casa después de un corto periodo de observación, aunque algunos pacientes prefieren quedarse un poco más de tiempo en el hospital. 

La recuperación después de una lipoescultura
Es importante que el paciente sepa que el tiempo de recuperación después de una lipoescultura varía dependiendo de cada individuo. 

Los primeros días después de la cirugía es importante que el paciente repose tranquilamente. Si es posible se recomienda mantener elevada la parte del cuerpo operada. Recuerda que no debes tomar aspirina ni ciertos medicamentos antiinflamatorios. Es muy posible que sea necesario llevar una faja durante el periodo de recuperación. Si la faja está muy apretada es necesario que le informes a tu cirujano. 

Durante la primeras 48 después de la cirugía, los pacientes pueden presentar varios grados de inflamación y hematomas, normalmente la inflamación persiste por más tiempo. Los hematomas típicamente desaparecen dentro de 7 a 10 días y las suturas son removidas después de una semana de la cirugía. 

Se recomienda evitar esforzarse, agacharse y levantar objetos durante el periodo postoperatorio. En la gran mayoría de los casos, el paciente puede regresar a sus actividades normales dentro de 10 ó menos días después de la cirugía. 

Los resultados de la lipoescultura

La lipoescultura es utilizada usualmente para mejorar el contorno del cuerpo. Como el proceso es de curación es gradual, el paciente debe esperar algunos meses para ver resultados precisos de la cirugía. Algunas pequeñas incisiones son realizadas para que se pueda introducir el instrumento conocido como cánula. Las cicatrices normalmente se desvaneces en unos meses y son apenas visibles. 


Los resultados de la lipoescultura usualmente son duraderos pero pudieran ser afectados con el envejecimiento, el aumento de peso, el embarazo y el estilo de vida. 

miércoles, 6 de mayo de 2015

Odio Mi Nariz (rinoplastía)

La rinoplastia es la cirugía que modifica la forma de la nariz, y es uno de los procedimientos quirúrgicos más frecuentemente realizados en cirugía plástica. La rinoplastia puede disminuir o aumentar el tamaño de la nariz, cambiar la forma de la punta o del dorso, estrechar los orificios nasales o cambiar el ángulo entre la nariz y el labio superior. También corrige los problemas congénitos, los traumatismos y algunos problemas respiratorios. 
Si usted esta considerando la posibilidad de someterse a una rinoplastia, obtendrá información básica acerca de la cirugía, cuándo está indicada, cómo se realiza y qué resultados se pueden esperar. Sin embargo, es imposible que todas sus preguntas queden contestadas, puesto que en gran parte dependen de factores personales y de las preferencias del cirujano plástico. Si no entiende algo, consulte a su cirujano plástico. 

¿Quién es el candidato ideal para someterse a una rinoplastia? 

Los candidatos ideales para someterse a una rinoplastia son aquellas personas que buscan una mejoría, y no una perfección absoluta, en su apariencia. Si usted posee un estado general de salud bueno, tiene una estabilidad psicológica, y es realista en sus expectativas, será un buen candidato. La rinoplastia mejorará su apariencia y la confianza en uno mismo, pero no conseguirá que nos parezcamos a otra persona o que nos traten de manera diferente. Antes de decidir si se va a realizar una rinoplastia piense qué quiere conseguir y discútalo con su cirujano plástico.

La edad también debe tenerse en cuenta. La mayoría de los cirujanos plásticos prefieren no realizar una rinoplastia hasta que no se haya dado el "estirón", es decir, hasta los 14 o 15 años en las niñas y algo más para los niños. Así mismo, es importante considerar los ajustes emocionales y sociales de los adolescentes, y estar seguros de que son ellos, y no sus padres, los que quieren someterse a una rinoplastia. 

La cirugía 

La rinoplastia se realiza siempre en quirófano, dentro de una clínica u hospital. Normalmente, se permanece en la clínica la noche tras la cirugía, dándose el alta al día siguiente.

La rinoplastia puede realizarse bajo anestesia local más sedación, o lo que es más frecuente, con anestesia general, dependiendo de la complejidad de la cirugía y de las preferencias de su cirujano. Si se realiza con anestesia local más sedación, el paciente se siente relajado y la nariz y sus alrededores están insensibles al dolor; con anestesia general el paciente está dormido durante la operación.

Una rinoplastia suele durar entre 1 y 2 horas, aunque en casos complejos puede llevar más tiempo. Durante la cirugía, la piel de la nariz se separa de su soporte, compuesto por hueso y cartílago, que es esculpido con la forma deseada. Finalmente la piel es redistribuida sobre este nuevo soporte. Muchos cirujanos plásticos realizan este procedimiento desde dentro de la nariz, haciendo unas pequeñas incisiones en el interior de los orificios nasales; otros prefieren hacer una rinoplastia abierta, sobre todo para los casos más complejos, en la que se realiza una pequeña incisión en la columela.
 
Cuando se completa la cirugía, se coloca una escayola de yeso u otro material, que ayudará a mantener la nueva forma de la nariz. También se colocan tapones nasales en ambos orificios para evitar el sangrado y estabilizar el tabique nasal.

La vuelta a la normalidad

Tras la cirugía, y sobre todo, durante las primeras 24 horas, puede sentir la cara hinchada, molestias sobre la nariz y dolor de cabeza, que ceden con medicación. Debe permanecer tumbado con la cabeza elevada durante el primer día (excepto para ir al baño). Notará que el hinchazón y los hematomas alrededor de los ojos aumentan hasta alcanzar un máximo a los 2 ó 3 días. Aplicándose compresas frías disminuirá la hinchazón y se encontrará mejor. En cualquier caso, se sentirá mejor de lo que pueda parecer por su aspecto. La mayoría de los hematomas y de la hinchazón desaparecerán en unas 2 semanas (un mínimo hinchazón, prácticamente sólo perceptible por su cirujano, podrá durar unos meses). Es normal que durante los primeros días se produzca un ligero sangrado por la nariz. No deberá sonarse la nariz con fuerza durante una semana, más o menos, hasta que los tejidos cicatricen. Si tiene tapones en la nariz, éstos serán retirados en 1 ó 2 días, tras lo cual se encontrará mucho mejor. Después de una semana, o como mucho dos, se le retirará la escayola, y los puntos de piel, si es que tiene.

La mayoría de los pacientes que se someten a una rinoplastia se encuentran bien en 2 días, siendo capaces de volver al trabajo o al colegio en una semana más o menos. Sin embargo, no se deberán realizar algunas actividades hasta que no pasen algunas semanas. Aunque su cirujano plástico le proporcionará instrucciones concretas, algunas recomendaciones son: evite actividades extenuantes (footing, natación, hacer flexiones,...) durante 2 a 3 semanas, evite golpes en la nariz y tomar el sol durante 8 semanas, lávese la cara y aplíquese maquillaje con cuidado. Puede volver a colocarse lentillas tan pronto como quiera, pero si lleva gafas debe tomar ciertas precauciones. Su cirujano plástico le irá viendo durante los meses siguientes a la cirugía para ver la evolución. Si tuviese alguna molestia entre visitas o alguna duda sobre lo que debe o no hacer, no dude en llamarle. 

lunes, 4 de mayo de 2015

¿Chachetón? Bye a los cachetes grandes

El anatomista y biólogo francés Xavier Bichat murió sin saber que su descripción de los acúmulos grasos que se encuentran en las mejillas sería el inicio para lo que ahora se conoce en su honor como bichectomía, cirugía plástica en la que se extraen estas bolsas de grasa que llevan su nombre con la finalidad de dar un aspecto más delgado al rostro.
La operación consiste en realizar dos incisiones internas, una en cada mejilla, justo en el espacio que hay entre las muelas inferiores y las superiores, por lo que tampoco habrá que preocuparse por las marcas que puedan quedar.
La intervención se recomienda después de los 16 años, pues es la edad aproximada en la que deja de crecer el rostro y hasta los 40, pues el rostro comienza a adelgazar conforme envejecemos.
La bichectomia es la cirugía en la cual se busca mejorar los rasgos faciales creando la ilusión óptica de tener la cara un poco más alargada y delgada, mejorando de esta manera el aspecto estético y la armonía facial. En la bichectomia se hace una incisión por dentro de la boca, se buscan las bolsas grasas malares (bolsas de bichat) y se retiran suavemente.
Después de haber realizado cientos de Bichectomías, podemos asegurar que en nuestras manos, es una cirugía con pocos e infrecuentes riesgos. Dentro de las complicaciones que pudieran existir existe la infección de la herida, zonas de menor sensibilidad de la piel, acumulación de líquido temporalmente en la mejilla o lesiones de un pequeño conducto que transporta saliva a la boca. Estas complicaciones, si llegaran a presentarse, se resuelven por sí mismas en casi todas las ocasiones, por lo que podemos considerar la cirugía de mejillas como un procedimiento muy seguro.
Es importante mencionar que el volumen de las mejillas no corresponde al peso corporal, por este motivo, se debe recalcar, que muchas personas que no tienen sobrepeso recurren a la cirugía de cachetes para obtener un rostro que vaya acorde con su estética corpórea. 
Una Bichectomía se realiza por medio de anestesia local y tiene una duración aproximada de media hora. Para la extracción del tejido graso, se hacen incisiones internas, lo que evita la marca de cicatrices en la cara.
Los cuidados para un paciente que se acaba de hacer una cirugía de cachetes son: dieta blanda, colocación de hielo en las mejillas, reposo moderado, no exposición al sol y evitar actividades físicas que requieran esfuerzo como el ejercicio.


viernes, 1 de mayo de 2015

¿Y si pasará lo peor?

Es sumamente importante que el paciente (y sus familiares también) se hallen informado sobre los riesgos de las cirugías al evaluar la posibilidad de practicarse una. Brindarle al paciente toda la información para su decisión, incluyendo la de los riesgos, es respetarlo y tratarlo como una persona, con voz y voto. 
Todos los pacientes tienen derecho a que les expliquen los detalles de la cirugía, riesgos y complicaciones (aquellos que no tienen como causa una mala práctica o equivocación de los Doctores y que se derivan de las cirugías en sí mismas y otros factores imposibles de predecir) ventajas y desventajas de determinadas técnicas para poder meditar sobre ello y hacer un balance, teniéndolo en cuenta para cualquier decisión. 
Siempre hay riesgos con cualquier cirugía, ya sea una cirugía electiva o sea una cirugía de urgencia, todas tienen riesgos comunes a toda cirugía y riesgos específicos de cada tipo de cirugía en particular.
Las cirugías no están libres de riesgos. Una cirugía estética-plástica es, valga la redundancia, una cirugía. Los riesgos van desde complicaciones postoperatorias que tienen solución secundariamente (mala cicatrización, seroma, necrosis de la piel, etc.) hasta graves y mortales complicaciones como por ejemplo una reacción a la anestesia, una embolia pulmonar (coágulos sanguíneos o  que pueden migrar al corazón, bloquear la arteria pulmonar produciendo graves lesiones o la muerte), etc.
En el año 1997 en los Estados Unidos se divulgaron los resultados de una encuesta, en base a 400.675 operaciones quirúrgicas de Cirugía Plástica y Reparadora, en las que se encontraron 7 muertes. El índice de las complicaciones serias (hipotensión, hematoma, infección, episodio hipertensivo, sepsis) fue del 0,47% (1 cada 230 pacientes). Una muerte ocurrió cada 57.000 pacientes, esto es un índice de mortalidad del 0,0017%; poco menos de 1 muerte cada 57.000 pacientes. La encuesta documenta el nivel de seguridad aproximado para las cirugías plásticas, realizadas por cirujanos plásticos certificados, en instalaciones autorizadas, en aquel país, (Estados Unidos de Norteamérica), y durante aquellos años. 
En las cirugías combinadas (donde se practican varios y diferentes procedimientos en una misma cirugía) hay un aumento del índice o frecuencia de complicaciones, debido a que las mismas son en general de mayor duración en tiempo, implican mayor traumatismo para el organismo, requieren la utilización de mayores cantidades de anestesia, asi como también implican un mayor tiempo de recuperación postoperatorio, entre varios factores. 
Los riesgos deberán ser reducidos a través de la medidas adecuadas y cumpliendo ciertas normas y requisitos, como por ejemplo con estudios prequirúrgicos, indicaciones pre y posquirúrgicas, práctica de la cirugía en las instalaciones adecuadas perfectamente equipadas para actuar ante cualquier inconveniente, Historia Clínica del paciente debidamente documentada por Doctores especialistas en Clínica Médica, prevención de la Trombosis Venosa Profunda y de la Embolia Pulmonar, etc. Se tendrá en cuenta que las complicaciones y riesgos pueden ocurrir aunque se tomen todos los recaudos necesarios para evitarlas y aunque el paciente se encuentre sano.